Entonces el apóstol continuó enseñando que simplemente no es suficiente hablar acerca del amor, ni amar en palabra y en lengua, sino de hecho y en verdad. Esa no es la única expresión de amor verdadero, sólo seguimos el ejemplo del amor de Dios cuando expresamos nuestro amor con hechos y en verdad. Así que amigo mío, préstele mucha atención a eso. mire, cuidadosamente el ejemplo del amor de Dios y vea cómo y de qué manera puede mejorar al seguir su ejemplo.
Vivir la vida amorosa
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